Los artistas fueran responsables por inmortalizar personajes históricos famosos, por medio de la pintura, la escultura o los retratos. Aunque las obras fueran producidas mientras vivían estas figuras, el arte ni siempre actúa con precisión. Incluso hay casos en que se ha ordenado que los artistas mejoraran el aspecto de la figura retratada. Pero hoy en día la tecnología nos permite conocer la real apariencia de estos personajes históricos. ¿Quieres saber más sobre este tema? ¡Sigue leyendo!
El Rey Tut, Faraón Egipcio
El Rey Tut Faraon Egipcio
Su reinado ocurrió entre 1332 y 1323 a. C., durante el Nuevo Reino de Egipto, y su tumba se ha quedado sellada por más 3200 años. Pero en 1922, su sepultura fue descubierta por Howard Carter, arqueólogo británico. Intacta, en la tumba del rey Tutankamón había tesoros preciosos y objetos que deberían acompañar al fallecido faraón en su jornada hacia “el otro lado”. El reinado de Tut duró solamente unos diez años, hasta que se murió. La descubierta de su verdadera apariencia permitió a los científicos saber qué había contribuido a la muerte del faraón.
Cómo El Faraón Tut Era Realmente
La momia de Tut fue estudiada por científicos, que descubrieron muchos problemas de salud en su ADN. Estos problemas probablemente llevaron el faraón a la muerte. Aunque fuera alto, Tutankamón era débil y sufría por un trastorno óseo. Además, al morir, tenía malaria y una infección en la pierna, que estaba rota. Hay evidencias de que era zambo, tal vez consecuencia de la tradicional endogamia en aquel momento: sus padres eran hermanos. Todas estas informaciones son capaces de explicar algunas peculiaridades del rey Tut y su vida. Una de ellas es su representación en los jeroglíficos, en los cuales Tutankamón está siempre sentado, incluso cuando practica el tiro con arco.
Como El Faraon Tut Era Realmente
